EL MITO DE LA BRECHA SALARIAL
"A las mujeres nos pagan menos que a los hombres por el mismo trabajo por el hecho de ser mujeres".Es algo que hemos escuchado cientos de veces y que se está poniendo de moda en los últimos años. En esta entrada, voy a explicar de dónde proviene esta creencia, cuál es su verdadero propósito y por qué es necesario entender las cosas antes de aceptarlas como verdades absolutas.
El mito de la Brecha Salarial tiene su origen en un estudio socioeconómico que se realizó en EEUU en el año 1967, en el que se comparó la media aritmética de los salarios de los hombres con la de las mujeres. El resultado fue una diferencia de 77 centavos a favor de los primeros (que representaría una diferencia del 23%). Tres años más tarde, la feminista Kate Millet publicaría su libro titulado "Política Sexual", en el que bautizaría esta diferencia con el término "Brecha Salarial" o "Wage Gap" y culparía de ello a una sociedad dominada por los hombres, a la que ella denominó "Patriarcado". Si queréis más información sobre este tema, revisad este otro artículo del blog:
EL AUGE Y LA CAÍDA DEL FEMINISMO
Antes de continuar, me gustaría hacer una pequeña reflexión. El término "Patriarcado" ha ido mutando con el paso de los años. Tiempo después, se convirtió en "Heteropatriarcado" y más tarde, en "Heteropatriarcado capitalista". Obviamente, esto no es más que una estrategia de marketing para unificar los distintos sectores de la izquierda política (feministas, LGTBI y marxistas de todo tipo) contra un enemigo común: el Estado. Pero aquí la palabra que importa es "capitalista". De acuerdo a esta concepción marxista del mundo, el capitalismo es ese monstruo dominado por los malvados empresarios que tan solo buscan aumentar más y más su riqueza, aún a costa de sus empleados. Pues bien, toda empresa tiene ingresos y tiene gastos, y da la casualidad de que la mayor parte de los gastos proviene de las nóminas de los empleados. Entonces, si a la mujer se le paga menos que al hombre por el mismo trabajo, ¿por qué no contratan solo mujeres? ¿Acaso se les dan mal las matemáticas? ¿Después de tanto criticar al capitalismo vamos a concluir que a los empresarios se les da mal la aritmética, en serio?
Sin duda alguna, el estudio más completo de la Brecha Salarial ha corrido a cargo de Christina Hoff Sommers, que es una escritora, filósofa, catedrática, economista (y erudita, bajo mi humilde opinión) contraria al feminismo moderno y que pertenece al American Enterprise Institute. Su estudio incluye factores tales como la ocupación, la posición, la educación o las horas trabajadas por semana. Incluso, para que no se diga que esta señora trata de manipular los datos, tenemos otros referentes, como el estudio realizado por la Asociación Americana de Mujeres Universitarias, que es de corte feminista, en el que se apunta a una diferencia de tan solo 6.6 centavos.
En 2009, el Departamento de Trabajo de EEUU publicó un artículo en el que analizaba más de 50 estudios económicos que explica que esta diferencia es atribuible en su mayor parte a las decisiones individuales que realizan las personas a la hora de escoger su trayectoria profesional.
La Universidad de Georgetown realizó un estudio de cuáles eran las 5 profesiones mejor y peor pagadas, así como su porcentaje de ocupación de hombres y mujeres.
Las 5 profesiones mejor pagadas son:
1. Ingeniería petrolera. 87% Hombres | 13% Mujeres
2. Ciencias farmacéuticas. 48% Hombres | 52% Mujeres
3. Matemáticas y ciencias de la computación. 67% Hombres | 33% Mujeres
4. Ingeniería aerospacial. 88% Hombres | 12% Mujeres
5. Ingeniería química. 72% Hombres | 28% Mujeres
Y las 5 profesiones peor pagadas son:
1. Consejería y psicología. 26% Hombres | 74% Mujeres
2. Educación infantil. 3% Hombres | 97% Mujeres
3. Teología y vocaciones religiosas. 66% Hombres | 34% Mujeres
4. Servicios humanos y Organización comunitaria. 19% Hombres | 81% Mujeres
5. Trabajo social. 12% Hombres | 88% Mujeres
Como vemos, de las 5 profesiones mejor pagadas, 4 están
mayormente ocupadas por hombres y de las 5 peor pagadas, 4 están mayormente
ocupadas por mujeres. En todo este descomunal estudio se han tenido en cuenta
otros múltiples factores, como la disponibilidad para viajar, la disponibilidad
para trabajar en horarios alternos, las horas extra, etc. Una vez aplicadas
todas estas variables, el Departamento de Trabajo de EEUU sitúa esta
diferencia entre un 4.8% y un 7% (muy alejado del 23% inicial), una cifra
prácticamente idéntica al 6.6% aportado por la Asociación Americana de
Mujeres Universitarias.
¿Y por qué existe una "Brecha Salarial" a pesar de ello? Los economistas afirman que existen tantas variables, que son incapaces de calcularlas todas, por lo que esa diferencia es imposible de explicar. Sin embargo, es bien sabido que algunos colectivos feministas sí que tienen una "explicación" para ello. Es esta:
"A las mujeres nos pagan menos que a los hombres por el mismo trabajo por el hecho de ser mujeres"¿Acaso saben ellas algo que los economistas desconocen?
Creo que más que de brecha salarial debería hablarse de diferencia de oportunidades. Hoy, en España, con la legislación actual, es muy difícil que una mujer cobre distinto que un hombre por el mismo trabajo. Cosa diferente es hablar de las oportunidades que se ofrecen a un hombre o a una mujer (un hombre con un puesto de responsabilidad cobrará más que una mujer con un puesto base). Muchas veces vemos fotos de reuniones internacionales (de organismos políticos, económicos, reuniones de empresarios, etc.) y la presencia de hombres frente a la de mujeres es abrumadora.
ResponderEliminarPrecisamente, en estos días están teniendo lugar debates políticos y en una televisión determinada cuando se habló de educación los intervinientes eran mayoritariamente mujeres; en cambio, cuando se habló de economía todos, sin excepción, eran hombres. ¿Es que las mujeres no entienden de economía?
Este es un camino al que todavía le queda mucho recorrido.
Normalmente, cuando un hombre llega a un puesto importante, se le supone su valía (como el valor en el ejército); cuando se trata de una mujer, tiene que demostrarlo.
Y este tener que abrirse paso a codazos es una de las causas por las que las mujeres tienen cada vez menos hijos, porque tener un hijo implica una ausencia de meses del trabajo, mientras que en ese tiempo hay compañeros que pueden seguir formándose y progresar.
Por todo ello creo que no se trata de eliminar la brecha salarial sino de eliminar las causas que la producen de hecho, y muchas de ellas hay que buscarlas en la mentalidad de los hombres, que son los que deciden en la mayoría de las veces, lo que nos lleva finalmente al tema de la educación, es preciso educar a los niños en valores como igualdad de oportunidades, mérito, capacidad, etc. así, cuando tengan que tomar decisiones (y me refiero tanto a hombres como mujeres), no se fijarán tanto en el sexo del candidato sino en sus capacidades personales.
Gracias por el comentario. Coincido en que el tema de la protección de la maternidad hay que mejorarlo, especialmente teniendo en cuenta que el permiso del hombre es de solamente 5 semanas cuando nace el bebé. Eso impide que sea la pareja la que decida quién trabaja y quién cuida al niño. Saludos cordiales.
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